La RAE dice:

La RAE dice:
Vaivén (De ir y venir).
1. m. Movimiento alternativo de un
cuerpo que después de recorrer una línea vuelve a describirla, caminando en
sentido contrario.
2. m. Variedad
inestable o inconstancia de las cosas en su duración o logro.
3. m. Encuentro o
riesgo que expone a perder lo que se intenta, o malograr lo que se
desea.
4. m. Mar. Cabo delgado, blanco o
alquitranado y de dos o tres cordones, que sirve para entrañar y forrar otros
más gruesos, dar ligadas y hacer ciertos tejidos.
5. m. ant. ariete
(‖ máquina militar).
6. Más todo lo demás (Su sentido poético)

domingo, 29 de enero de 2012

Nómbren por las dudas

Viven los comunicados distantes.
Pasan como pasan los minutos
cuando estamos inmersos en las horas.

Viaja el nombre hacia el ahora

en rostros que nunca cesan de ser misterio
y, nombrando, vamos introduciendo al cuerpo
el ritual del conocer lo que se nombra.

Al que nombra,
que no desespere ni huya
que acepte que los nombres son mutables
pues, con cada nuevo ser que pregunta
ellos se reinventan en los cuerpos
ellos que siempre pueden mostrar una nueva sombra.
Y es así que nunca cesa el enigma.
solo, nómbren, en un suspiro sonoro
cercanas y recíprocas palabras
donde los hablantes, al unísono,
adivinan las sílabas que faltan.

lunes, 23 de enero de 2012

Mi vecina Amparo


(Basado en hechos reales)

 
El ojo derecho siempre con una lagrima, que vuelve aún más vidriosa, la mirada, perdida en el pequeño hueco de luz que es su ventana. Lágrima, que nunca llega a recorrer los surcos de su piel. Tres pelos debe de tener la pobre, los cuales, peina con cariño su marido, con un peine del cual se podría, debido a que hay en él varios fragmentos de su pellejo, sacar el ADN. Y en la prueba de ADN vendría que, por su genética, sufre una mutación en las manos, las cuales tienen forma de garras de topo, unas largas uñas, amarillas y gastadas, de tanto intentar hacer un túnel que llegue hasta la cabecera de mi cama.  Y su voz, da un cavernoso quejido, mezclado con una cansada tos, retumba en toda mi casa. Solo, a veces, cuando su marido le canta coplas con voz dulce, pero, cansada... Ella parece entenderle y su sonoro llanto descansa, es entonces, cuando, articula silabas abstractas. Amparo parece que intenta hablar pero no voy a ser yo la que, en su boca, pueda poner palabras.

(Proximamente, si es posible, la versión positiva)


Para mi reflejo

http://www.youtube.com/watch?v=bLRZPMqoacE Gracias, en parte, a Boza. (A ser posible leer con la canción ;) )


- Podría subirme, aún, en un pedestal de vanidad y prepotencias pero, reflejo, prefiero siempre que te pierdas en la equidad de una balanza con demasiada bondad. Luego en la secreta noche ruedas por los techos,  mundo al revés, donde te subes el incendio a la cama. Y te desmiembras, cubista, a caladas estrechas. Sueñas despierta, imaginando que el zumbido de los coches es el del lejano mar. Las mujeres de tus fotos sabemos lo demás. Tu estar serena, con ojos de una lechuza, cada vez más en la niebla, más allá de la tierra. Las enjutas señoras de los autobuses se dan cuenta, de que, te evades con demasiada facilidad. Y que, a veces, tu única seguridad es saber que piensas... Reflejo, a veces, te vas tan lejos y me dejas sin nada más, que unas cuantas, oxidadas, sentencias, que se mueren de ganas de hablar con los demás. !Reflejo! tu mismo eres una alucinación en el espejo de la voluntad, que somos sino, mero deseo que se quedó, quizás, demasiado tiempo mirándose más a sí mismo que a los demás. Y, ahora, necesitas estar siempre ocupada, en el espejismo de un andar de vértigo por las aceras, y siempre temes desestabilizar la balanza. Pero ansías en verdad quedarte fuera de juego...-
 ...acompañada,
 sin ti misma,
solo, en ti misma,
 solo, sentir y no pensar.

jueves, 19 de enero de 2012

Por el ruido de un calentador de aceite

Allá la noche se lavó la cara en la orilla, hundida hasta las pezuñas, pues tiene forma de buey de bronce, metal que se calienta, a la sombra del azuLuna marino. En los soportales del puerto colisiones de plata ha dejado su cornamenta, embestidas que han vencido la luz de los hogares; pues todo está opaco,  no es niebla, son la humedad y la maraña que están despiertas. Pernoctan detrás de los espejos y en el bao del interior de algunos cuerpos, por eso cuando es de noche nunca debéis atreveros a mirar en ellos. Y en la noche, es cuando las cosas cobran vida, mientras, los llorones solo escuchan su llanto, los cansados disfrutan de su merecido descanso, los miedicas fingen estar dormidos y los que sueñan despiertos (despiertan soñando) escuchan el silencioso quejido de un mundo extraño.

domingo, 15 de enero de 2012

Proyecto (¿?)

Buenas noches.
     De pequeña, cuando aún no era propiamente la autora de su historia, sus padres le daban paseos nocturnos en un pequeño, Renault Oasis rojo. Entonces, se apoderaba de la inquieta niña un sopor inaudito que la hacía dormirse, arrullada por el zumbido del motor. De manera casi automática caía en brazos de Morfeo. Su madre era la que conducía, su padre se encargaba de elegir la música, algún disco de New Age o algún kirie sacado de los monasterios, que, enlatado, gravado y vendido había acabado como banda sonora, junto con el run run del coche; creando así la atmosfera precisa para aquella familia.
-          Ya se ha dormido  – dijo el padre
-          Pues ahora que no se despierte cuando la saquemos del coche – susurro la madre, previendo lo que pasaba alguna veces, cuando, nada más apagar el motor, la niña empezaba a emitir ruiditos y ha a restregarse la cara con sus pequeñas manos, despertándose así de nuevo y comenzando a llorar.

     Pero esta vez la niña había tenido un día intenso, le habían dado mucho juego y estaba tan cansada y saciada de leche que ni se entero de que su padre la sacaba de la sillita del coche, la ponía en sus brazos, subía las escaleras que llevaban del garaje hasta el amplio rellano de su piso y, después de quitar, lenta y cuidadosamente los dos golpes de llave de la cerradura de la casa, la llevaban ya, sin ninguna amenazada que pudieran des-velarla, a su cuna.